Tegucigalpa. Mega Distribuidora Avícola y Supermercados La Colonia reafirman su compromiso continuo con la calidad y la seguridad alimentaria al lanzar un nuevo sello de calidad e inocuidad en su producto el huevo. Tras años de dedicación y compromiso con la salud del consumidor, Mega Distribuidora Avícola ha desarrollado este sello como un testimonio de su compromiso con la excelencia en la producción y distribución de huevos de la más alta calidad.
Durante el lanzamiento, Luis Gustavo Mancía, representante de Mega Distribuidora Avícola, dijo que el sello viene a proteger la salud del consumidor y darle la seguridad que las granjas están bajo inspección constante por la autoridad oficial, quien verifica que todos los lotes de aves en producción se someten a análisis por laboratorios oficiales certificados del país.
Entre las actividades desarrolladas en el evento, contaron con la participación de chefs, quienes hicieron diferentes preparaciones de recetas donde incluye el huevo, como proteína principal. Adicional a ello, interactuaron con el público presente realizando concursos gastronómicos.
“Estamos conscientes de nuestra responsabilidad social empresarial, ofreciendo productos de confianza y las autoridades oficiales del país a través del Servicio Nacional De Sanidad e Inocuidad Agroalimentaria (SENASA) adscrita a la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG), respaldan nuestro sello”, señaló Mancía.
Beneficios del sello
Por su parte, el Gerente de Mercadeo de Supermercado La Colonia, Harold Lovo, manifestó que ellos como empresa líder en ofrecer productos de calidad es muy importante saber que cuentan con un aliado estratégico, con credibilidad y transparencia alineados con los estándares nacionales e internacionales. “Tenemos una visión compartida con la empresa Mega Distribuidora avícola, de promover la competitividad, calidad e inocuidad para seguir fortaleciendo la salud de nuestros clientes”.
La Inocuidad de los alimentos es un asunto de todos, es por eso que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), determinaron en el 2019 hacer cambios drásticos para asegurar que los productos alimenticios no van a enfermar al consumidor.