La industria camaronera de Honduras enfrenta una crisis sin precedentes debido a la ruptura de relaciones diplomáticas y comerciales con Taiwán, su principal mercado. La situación es muy preocupante y el gobierno de Castro aún no toma medidas rápidas y efectivas para evitar el colapso de la industria.
Los principales problemas de la industria son:
- Cierre de fincas: En 2023, se registraron cuatro millones de kilos dejados de exportar, que equivalen a unos us$39 millones en divisas. A esto se suma el cierre temporal o definitivo de varias fincas, dejando en la calle a unos mil empleados.
- Pérdida de empleos: La industria camaronera genera unos 100.000 empleos directos e indirectos en Honduras. El cierre de fincas y la pérdida de exportaciones están provocando la pérdida de miles de empleos.
- Reducción de las exportaciones: En 2023, las exportaciones de camarón de Honduras cayeron un 30%, en comparación con el año anterior.
La razón de esta crisis es la ruptura de relaciones con Taiwán. Antes de la ruptura, Taiwán era el principal mercado de exportación del camarón hondureño. Los taiwaneses pagaban un precio premium por el camarón hondureño, debido a su alta calidad.
Después de la ruptura, los chinos quieren comprar el camarón hondureño al 50% menos del precio que pagaban los taiwaneses. Los camaroneros hondureños no pueden vender al precio que los chinos quieren porque el camarón hondureño es de alta calidad y tiene una buena reputación en el mercado.
El gobierno hondureño prometió que los nuevos aliados orientales se harían cargo del subsidio que les daban los taiwaneses. Sin embargo, hasta el momento, esa promesa no se ha cumplido.
El director de la Asociación Nacional de Acuicultores de Honduras (Andah), Javier Amador, lamentó que el gobierno no les hiciera caso cuando les advirtieron que se aseguraran con los chinos si estaban dispuestos a comprar las cuotas de exportaciones al mismo precio.
La alternativa sería reactivar el tratado comercial suscrito con Corea del Sur en 2021. Sin embargo, es probable que Corea del Sur no quiera comprar camarón a Honduras por celos geopolíticos.
Estados Unidos al rescate del camarón hondureño
La embajadora de Estados Unidos en Honduras, Laura Dogu, se reunió recientemente con ejecutivos de ESF Seafood, una empresa camaronera con 12 años de presencia en Choluteca, ciudad en sur de Honduras. El encuentro tuvo lugar en un momento crítico para la industria, que ha experimentado la pérdida de al menos 10 mil empleos, entre directos e indirectos.
Dogu expresó su apoyo a la industria camaronera hondureña, resaltando su importancia como generadora de empleo en la región sur del país. A través de su cuenta en la red social, la embajadora destacó la noble historia de esta industria y su impacto positivo en la economía local.
En el mensaje, Dogu elogió los planes de ESF para realizar una transición hacia la producción de valor agregado y modernizar la operación. Consideró esta estrategia como una oportunidad para revitalizar la industria y generar nuevos empleos.
A finales de 2023, ESF Seafood anunció la adopción de un sistema de energías renovables en su planta de transformación de camarones. Esta medida forma parte de los esfuerzos de la empresa para abordar los retos ambientales y económicos que enfrenta la industria camaronera.
La empresa camaronera implementará una microred de energía solar en su primera fase. Se estima que este sistema sustituirá más del 60% del consumo de energía por electricidad.
La visita de la embajadora Dogu a ESF Seafood es un gesto de apoyo a la industria camaronera hondureña. La adopción de una estrategia de valor agregado y la inversión en energías renovables son pasos positivos para revitalizar la industria y crear empleos