Tegucigalpa. Las remesas familiares a Honduras registraron un leve descenso durante el primer trimestre de 2024, totalizando 2.101,2 millones de dólares. Esta cifra representa una caída del 0,9% en comparación con el mismo período del año anterior, según informa el Banco Central de Honduras (BCH).
A pesar de esta leve disminución, las remesas continúan siendo un pilar fundamental de la economía hondureña, representando alrededor del 25% del Producto Interno Bruto (PIB). En 2023, las remesas totales alcanzaron los 9.177,5 millones de dólares, marcando un aumento del 5,7% respecto a 2022.
Las principales fuentes de las remesas para Honduras son Estados Unidos (más del 80%), España (8,8%) y México (1,2%). Entre enero y marzo de 2024, el país recibió 740,7 millones de dólares en remesas solo durante marzo, superando los montos registrados en febrero (699,5 millones) y enero (660,9 millones).
En cuanto al destino de las remesas, el 79,6% se destina principalmente a cubrir gastos básicos como alimentación, salud y educación. Un 6,4% se invierte en capital fijo, mientras que el resto se distribuye en otros rubros.
Las remesas familiares son recibidas principalmente por madres (39%), hermanos (16,9%), padres (13,3%), hijos (12,5%), cónyuges (6,6%) y abuelos (2,4%).
Se espera que las remesas a Honduras continúen creciendo en 2024, alcanzando los 9.518 millones de dólares, según proyecciones del Banco Central. Para el 2025, se estima un aumento adicional a 9.804 millones de dólares.